En esta autobiografía, Saramago nos invita a conocer la relación con ese niño que fue, a destapar los recuerdos para poder verlos de frente.
La infancia se arrebuja entre las mantas de la memoria. De vez en cuando, surgen algunos recuerdos, que nos permiten saber quiénes fuimos, por qué somos esto hoy.
Eso le pasa a José Saramago en su libro Las pequeñas memorias, una autobiografía de la que aquí les leo un fragmento. En particular, comparto el segmento en el que habla de su acercamiento a los libros, la lectura y la escritura.
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Sobre José Saramago
José de Sousa nació en 1922. Saramago, apodo de su padre, fue agregado por el registro civil como segundo apellido.
Fue al colegio hasta los 12 y luego eligió una formación con salida laboral: cerrajero mecánico.
No tuvo libros propios hasta los 19, y fue en la escuela de cerrajería que conoció la pasión por la literatura. Militó en el Comunismo y eso le trajo bastantes inconvenientes.
Aunque ya había incursionado en la escritura, su primer libro de renombre fue Los posibles poemas en 1966. Seguirían, entre otros, El año de la muerte de Ricardo Reis, El Evangelio según Jesucristo, Ensayo sobre la ceguera y La caverna. En 1998 recibió el Nobel y falleció en 2010 dejando algunas obras sin terminar.
